Desde hace mucho tiempo vengo tomando fotografías, por que descubrí que es lo que me gusta, ahora no puedo parar, y es que, es algo que no conoce limites; el tener una cámara en mano, y salir sin un destino fijo, es una buena combinación, empecé con fotos familiares, luego tuve la oportunidad de tomar mi primer clase en forma, donde descubrí que no solo son las fotos familiares o las de las fiestas las que se pueden apreciar; después me fui metiendo en este rollo de la fotografía y tome cursos, fui a exposiciones y aprendí que puedo tomar ángulos, lugares, personas y situaciones, que nadie mas tendrá, ya que solo yo supe en que momento paso y lo capté, y no solo eso, tambien aprendes que puedes tomar cosas que son tan sublimes, tan abstractas y tan bonitas...
como ayer mientras estaba tirada en el pasto, y decidí hacerle una foto a mi cámara, compañera de ley, y de la que es probable nunca me separe.
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